miércoles, 19 de octubre de 2011

CONSIDERANDO

PIENSO LUEGO EXISTO....
Reconozco entonces que a veces, y sólo a veces, mi existencia es de lo más insulsa. Y es que a veces, y repito, sólo a veces, mis pensamientos son harto absurdos e infumables.
Por eso he tomado una decisión: ya no PIENSO, ahora YO CONSIDERO.

Y esto me lo ha inculcado mi querido padre, considerador donde los haya, que siempre empieza las frases con su ya más que famoso: "Yo, considero que..."
Esta frase, además de aliviarme en mi existencia, me ha salvado el trasero en innumerables ocasiones. Y es que, las consideraciones esquivan las discusiones y son expertas en callar pedantes. 
Además, queda más cool, más in, más chic. ¡¡¡ Y eso moooolaa !!!
Para que me entendáis, un ejemplo de consideración:
- Considero que eres un capullo.
- ¿Cómo, después de tantos años piensas eso de mí?
- Perdona, pero no he dicho que lo piense, sólo que lo considero. Y trás considerarlo puedo decirte, que lo pienso.
Si dices esto de carrerilla, con la mano en el pecho y sonriente ¡ya está! Capullo hecho un lío y silenciado.
Al menos, el tiempo que tarde en pensar lo que le has dicho...
Porque pensar requiere su tiempo, eso es obvio.
El mundo está tan lleno de grandes pensadores, que considero oportuna e incluso necesaria la reivindicación  de la CONSIDERACIÓN.
Ya lo estoy viendo: 
" Silvia; renegada pensante y sin embargo, gran consideradora".
Siiiiii......


Desde que tengo uso de razón (aunque nunca haya sido mucho), mi padre me ha reñido con "consideración", y era guay, era otra cosa. Porque no es lo mismo que te digan:
- ¡ Estás castigada sin salir!
A que te comenten:
- Considero que no saldrás hasta el fín de los tiempos.
Es más light, más llevadero, más.... ¡Que coño!  Era lo mismo, sin embargo, sonaba mucho mejor con diferencia. Y eso te hacía sentirte menos mal.
Considerar es dejar sitio a diferentes puntos de vista. 
"Pienso que..." es inamovible, tajante, lo piensas y punto.
Considerar sin embargo, te da opción a cambiar tu consideración en el momento oportuno.
Y eso nunca viene mal. Sobre todo cuando metes la pata y no vislumbras salida...
Por eso yo, cônsîderô,,cônsîderâvî,cônsîderâtum'.  
Además creo, que al mundo no le vendría mal un poco de CONSIDERACIÓN.