lunes, 14 de diciembre de 2009

PAULA Y LA NIEVE.

Paula se estira bajo las mantas.
Su menudo cuerpecito se revuelve entre ellas, receloso de salir.
Fuera hace frio.
Al fin, de un salto, corre hacia la ventana. De repente se acordo de la nieve:
*¿Habra llegado ya?*, pensaba excitada.
Los cristales estaban empañados por el frio. Paula los limpio con el puño del pijama y miro esperanzada a traves de ellos.
Nada. Tan solo seguia lloviendo.
Volvio a su cama, triste, desilusionada.
*¿Porque no viene? ¿Me habre portado mal?*
Esas navidades cumplia 5 añitos y aun no habia visto la nieve.Queria tocarla, jugar con ella, decirla cuanto la habia esperado, cuanto la queria...
Sus padres le habian contado historias preciosas sobre ella.
Le contaban, que de pequeños, hacian muñecos con la nieve y les ponian por nariz una zanahoria.
*¿Una zanahoria?* se asombraba Paula. *Pero si no tienen agujeros. No podra respirar.*
Y sus padres, sonriendo, le decian que el muñeco, al ser de nieve, era magico.
*¡Anda! como los Reyes Magos.*
Paula se envolvio de nuevo en sus mantas y comenzo a llorar. Al principio calladamente, pero al final, con gran desconsuelo.
No queria esperar mas.
Asi que, se levanto, fue hacia su escritorio, cogio ceras de colores y un papel en blanco, y escribio:

* Queridos Reyes Magos. Este año cumplo 5 años y he sido muy, muy, muy buena. Como se que sois magos, como Merlin, quiero pediros que me traigais un poquito de nieve. De esa blanca y magica como vosotros, para hacer un muñeco. No os preocupeis si no teneis zanahorias, porque mi mama tiene muchas en la nevera. Prometo cuidar muy, muy, muy bien a la nieve. Y taparla con mi mantita preferida si tiene frio. Si la encontrais, decirla que la quiero mucho, que me he portado muy bien y que quiero conocerla. Bueno, a vosotros tambien os quiero mucho. No voy a pedir nada mas, pero si quereis traerme algun juguete no me importa.
Paula, una niña muy, muy, muy buena que os quiere mucho.*
Y de camino al colegio, la echo al primer buzon que encontro.
Esa noche, soño que la nieve venia a verla y que jugaba con ella y hacian juntas un enorme muñeco magico, con una gigantesca zanahoria por nariz.
Paula desperto pronto aquella mañana. Tenia mas frio que de costumbre, y algo revoloteaba por su estomago haciendola cosquillas.
Se levanto de un brinco, tropezando con la mesilla. *¡Aaayyy, mi dedo gordito!*
Fue hasta la ventana, la desempaño con el puño del pijama....y de repente, sus ojos se abrieron como platos.
¡ Estaba alli, los Reyes recibieron su carta y la habian encontrado !
¡ Que blanca, brillaba, era hermosa...y la sonreia!
*¡ Hola nieve, hooooooolaaaaa!* Gritaba sin cesar.
Se vistio presurosa y corrio al encuentro de sus padres.
*¡Esta aqui, esta aqui. Ha venido a conocerme. Vamos, vamos a jugar con ella. Papa, venga, hagamos un muñeco magico. Mama, mama, date prisa.No sea que tenga frio y se marche.!*
Salieron al jardin.
Las bolas de nieve iban de un lado a otro. Paula reia contenta, y sus padres con ella.
Y llego el momento de hacer el muñeco magico.
Paula acompaño a su madre a la nevera, y cogio la zanahoria mas grande que encontro. Despues, corrieron al costurero y buscaron hasta encontrar dos inmensos botones negros.
Regresaron al jardin.
Juntaron un monton de nieve, y poco a poco, el muñeco fue tomando forma.
Una vez acabado, Paula le puso la nariz-zanahoria y los ojos-botones. Y para terminar, papa le pinto una enorme sonrisa con un palito.
Paula se aparto para mirarlo de frente.
*¡Que bonito es! Pero...no se mueve, ¿estais seguros de que es magico? Parece, no se...un muñeco.*
*Tranquila cariño. Debes dar tiempo a que la magia llegue.* Dijo papa.
Paula estaba preocupada.
*Venga, entremos en casa. Hace demasiado frio.* Dijo mama.
Y Paula se dispuso a entar a regañadientes.
Justo en el momento en que la puerta se cerraba, Paula oyo una leve risita procedente del jardin. Rapido, se dio la vuelta...y entonces lo vio.
La magia habia llegado hasta el muñeco. Y este la sonreia abiertamente guiñandola uno de aquellos enormes ojos-botones.
Paula sonrio a su vez. Tenia un nuevo amiguito, ¡ y era magico! Sus amigos del cole iban a alucinar en colores.
Aquella noche Paula estaba pletorica, feliz, emocionada.
Sin embargo, una idea no la dejaba dormir:
*¿ Que pasaria cuando la nieve se marchase? ¿Se iria su amigo con ella? Seguro que no. Era su amigo, se quedaria con ella.*
Paula decidio entonces que por la mañana prontito, saldria al jardin, cogeria a su nuevo amiguito, y lo meteria en su cuarto a jugar. Asi, no se aburriria, ni sentiria frio. Y entonces, se quedaria siempre junto a ella.
* Si, mañana le invitare a mi cuarto a jugar.*
Y sus ojos comenzaron a cerrarse, y su boca dibujo una sonrisa.
Y asi, plena de felicidad, se durmio.
Fuera, el muñeco velaba sus sueños, y la nieve cantaba una dule cancion de cuna.
Asi comenzo la navidad de Paula.
Asi fue como, por un instante, la Magia volvio a tener cabida en un hogar.

Silvia 09.

OJALA TODOS LLEVARAMOS DENTRO UN PEDACITO DE PAULA. OJALA CUIDARAMOS MAS DE NUESTRO NIÑO INTERIOR. OJALA... PORQUE SOLO ASI, LA MAGIA TENDRIA CABIDA EN NUESTRO MUNDO. PORQUE SOLO ASI, DESCUBRIRIAMOS LA SONRISA DEL MUÑECO. PORQUE SOLO ASI, NUESTRA FELICIDAD SERIA PLENA.

FELICES FIESTAS, Y QUE LA MAGIA OS ACOMPAÑE, SIEMPRE!!!